Azvi ha concluido con éxito los trabajos de desmantelamiento del puente provisional existente en el Danubio, antes de la construcción del nuevo puente Žeželj, y que sustituía al que fue bombardeado, en 1999, durante la guerra de los Balcanes.
Se trataba de una estructura metálica de cinco vanos, cuatro de 72 metros con un peso aproximado de 180 toneladas, y uno de 102 metros y 320 toneladas. Los trabajos comenzaron una vez que fueron retirados todos los elementos no estructurales de cada vano, como el pavimento carretero, la vía ferroviaria, las pasarelas laterales peatonales y las conducciones hidráulicas.
Azvi diseñó, en colaboración con la empresa de movimientos de grandes cargas ALE y la ingeniería K2, un procedimiento para retirar los 5 vanos en tiempo récord, a un ritmo de 2 días por vano, contando con la dificultad de trabajar en el Danubio y estando situado el vano más largo sobre el canal de navegación del río, lo que implicaba su corte.
El procedimiento ha consistido en el uso de una pontona modular de 1300 m² sobre la que se instaló un sistema de elevación de grandes cargas constituidos por 4 MegaJacks (megagatos) de 800 toneladas cada uno. Estos sistemas elevaban dos vigas que descansaban en apoyos provisionales diseñados para tal uso y permitían la elevación de los vanos y su correspondiente traslado. La navegación se efectuó con la ayuda de un remolcador de 700 cv y dos remolcadores auxiliares de 250 cv.
Una vez en la orilla, se procedió a la descarga de cada uno de los vanos sobre una antigua estructura existente, siendo necesaria la ejecución de unos nuevos pilotes de cimentación y la colocación de unas nuevas vigas estructurales, en la que se instaló un sistema de deslizamiento con gatos sobre patines (Skindshoes) para poder depositarlos en tierra firme, sobre unos plintos provisionales de hormigón, y proceder a su desmontaje pieza a pieza.
El siguiente paso será la demolición de las pilas y estribos sobre los que apoyaba la estructura metálica desmantelada.
Así, la estampa del nuevo puente Žeželj quedará limpia de todo impacto visual, destacando, más si cabe, sobre el Danubio a su paso por la cuidad serbia de Novi Sad.